De acuerdo con Naciones Unidas, la república islámica ha ejecutado a unas 252 personas en los menos de 90 días que van del año.
GINEBRA, 16 de marzo de 2015.– La situación de derechos humanos en Irán se ha deteriorado de manera significativa con unas 252 personas ejecutadas en lo que va del año, la mayoría por delitos menores relacionados con las drogas.
El relator especial de Naciones Unidas para Irán, Ahmed Shaheed, dijo en rueda de prensa que la república islámica «sigue ejecutando a más personas percápita que cualquier otro país en el mundo».
«Una proporción considerable de estos es por delitos de drogas que no cumplen las normas internacionales para la aplicación de la pena de muerte”, expresó Shaheed.
El año pasado, según el relator, el gobierno iraní ejecutó a un total de 753 personas.
Es decir que desde enero del año pasado a esta fecha, “se han llevado a cabo más de mil ejecuciones (…) una cifra muy alta que aumenta con rapidez”, observó.
Y «lamentablemente, las autoridades de Irán siguen acosando, arrestando, enjuiciando y encarcelando a los miembros de la sociedad civil que expresan críticas al gobierno”, señaló.
De igual forma, es el país en el que más periodistas se encuentran tras las rejas de todo el mundo, subrayó.
«A menudo por cargos como propaganda contra el sistema, de reunión y conspiración en contra del sistema, y por ofender a los líderes del gobierno”, indicó.
El relator de la ONU reiteró su llamado al gobierno para que ponga inmediatamente en libertad a todas las personas actualmente detenidas por cuestiones relacionadas con la “expresión, opinión, creencia o asociación».
Según el experto, las múltiples facciones involucradas en el Estado quizá están tratando de contrarrestar la agenda “reformista” del presidente Hassan Rouhani.
«En un lenguaje muy simple -dijo Shaheed- hay elementos que son de línea dura que podrían querer socavar la imagen del presidente como un reformista”, explicó.
Shaheed fue cuestionado respecto a las negociaciones sobre el programa nuclear iraní entre el P5+1 formado por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China y Rusia más Alemania, con el gobierno de Teherán, las cuales se desarrollan en la ciudad suiza de Lausanne.
A ello, el ministro iraní consideró que el país islámico estaría en condiciones de mejorar su récord de derechos humanos si logra llegar a un acuerdo con las potencias, dicho pacto le exige demostrar que los fines del programa nuclear iraní son pacíficos.