En todos los estratos sociales, jóvenes o adultas, las mujeres continúan viviendo en la intimidad este tipo de violencia de la cual “no se debe hablar”.
Mérida, Yuc. 13 de marzo 2015.- Afortunadamente, la violencia sexual ya se está poniendo sobre la mesa, hace algunos años era un tema que se ocultaba y las mujeres no se atrevían a manifestarlo, indicó María Herrera Páramo, directora del Instituto municipal de la Mujer en Mérida.
La violencia sexual abarca actos que van desde el acoso verbal a la penetración forzada y una variedad de tipos de coacción, desde la presión social y la intimidación por la fuerza física. Sin embargo, no se trata de una situación cultura sino de estructura.
“Es decir, que las mujeres viven la violencia por el hecho de ser mujeres; es una situación que no se puede cambiar ni con un sexenio, ni con dos; se tiene que ir cambiando durante la existencia, ya que es un problema estructural contra las mujeres en todos los ámbitos”, indicó.
Señaló que es necesario reforzar las políticas acertadas a favor de los derechos de las mujeres en cada Gobierno, “debe hacerse entre todos, ya que las políticas sociales no deben surgir únicamente de una institución y que las demás no hagan nada, depende de todos”.
Desafortunadamente existen factores que agravan esta situación como es la crisis económica, “que provoca cambios en los hogares, la gente se queda sin trabajo, los hombres ya no son los proveedores, las mujeres además de ser económicamente activas tienen que continuar con las labores del hogar, el cuidado de los hijos”.
Agregó que la violencia sexual es algo que está permanentemente en la vida de las mujeres, “pero es algo de lo que no se habla, ha sido tratado como algo íntimo, que nadie tiene que enterarse, pero es tan grave en la gente con recursos económicos de alto poder como en la que no tiene nada; por eso necesitamos educación, decirles desde niños que las mujeres no somos un objeto sexual”.
Recordó que incluso la mujer ha sido –y sigue siendo- “botín de guerra”, actualmente se siguen viendo actos de barbarie contra mujeres y niños en sitios que son tomados por algún contrario, “donde no sólo son violadas, sino secuestradas y mutiladas”.
Por último, hizo un llamado a que las mujeres no repitan la historia con sus hijas “tenemos que informarnos y darnos cuenta de que la violencia es un delito, tenemos que conocer los derechos de las mujeres, cuáles son las modificaciones del Código de Familia”
Actualmente, el Instituto municipal de la Mujer atiende en promedio al mes entre 300 y 350 mujeres en todos los servicios, tanto en el ámbito comunitario como atención jurídica, psicológica y trabajo social, individual o en grupos. (Subiria Duarte)