Tras siete años de cárcel, Sandra Ávila Beltrán recupera su libertad, ya que no se le pudo comprobar sus vínculos con el narcotráfico
México, 08 de febrero del 2014.- Después de siete años de enfrentar procesos penales, Sandra Ávila Beltrán, La Reina del Pacífico, recupera su libertad ya que un Tribunal Unitario ordenó su ex carcelación inmediata. Así, la justicia mexicana nunca le pudo comprobar delitos vinculados con operaciones del narcotráfico, aunque la Procuraduría General de la República (PGR) la exhibió en 2007 como una pieza clave del cártel de Sinaloa.
Bajo el argumento de que Ávila Beltrán, ya había sido juzgada por el mismo delito tanto en México como en Estados Unidos, la magistrada del Segundo Tribunal Unitario del Tercer Circuito revocó la sentencia dictada en su contra por el Juez Séptimo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de Jalisco y ordenó su liberación.
Ayer, minutos antes de las 22:00 horas, a bordo de una camioneta y acompañada de sus familiares, Sandra Ávila abandonó el Centro Federal de Readaptación Social número 4, de Tepic, Nayarit, donde fue recluida en febrero de 2011.
La resolución que tomó el Segundo Tribunal Unitario se dio luego de que la defensa de la inculpada interpuso el recurso de apelación por la sentencia en su contra, la cual se emitió en septiembre de 2014, por la que debía permanecer cinco años en prisión y pagar con mil días de multa, lo anterior por ser penalmente responsable en la comisión del delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Según autoridades de la PGR el Ministerio Público de la Federación no cuenta con ningún otro expediente penal en el que se vincule a Ávila Beltrán a otro proceso penal para evitar su salida. Además, detallaron que la dependencia no puede apelar el falloque emitió el Tribunal.
Familiar de José Quintero Payán, Rafael Caro Quintero y Miguel Ángel Félix Gallardo, la mujer fue detenida el 27 de septiembre de 2007 en la ciudad de México junto con el narcotraficante colombiano Juan Diego Espinosa, El Tigre. Sandra Ávila era considerada por el gobierno federal como una de las más importantes operadoras del cártel de Sinaloa, en ese momento al servicio de Joaquín El Chapo Guzmán.
El gobierno la exhibió como una de las capturas más importantes durante el mandato del ex presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Al ser detenida, el Ministerio Público de la federación inició un proceso penal en su contra por el delito de recursos de procedencia ilícita en la causa penal 101/2003, en el Juzgado 18 de Distrito de Procedimiento Penales Federales en el Distrito Federal, delito por el cual fue absuelta.
Sin embargo, el 15 de febrero de 2011 el Juzgado Séptimo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de Jalisco, concedió una orden de aprehensión en su contra por lavado de dinero a solicitud de la PGR, según la causa penal 46/2011.
En EU la corte federal de distrito para el Distrito Sur de Florida la acusó de haber conspirado para el tráfico de más de 100 kilogramos de cocaína, por lo que en agosto de 2012 Sandra Ávila fue entregada a las autoridades norteamericanas en cumplimiento al acuerdo de extradición del 12 de junio del 2012.
Fue juzgada en ese país y se declaró culpable de dar asistencia económica al narcotraficante El Tigre, su pareja.
Al ser extraditada a Estados Unidos, en septiembre de 2012, se suspendió su proceso, por lo que el 7 de agosto de 2013 el Juez Séptimo de Distrito de Procesos Penales Federales en Jalisco, dictó orden de reaprehensión y el 20 de agosto de ese año, fue repatriada a México.