Actualmente está preparando un disco sinfónico.
Ciudad de México, México, 7 de agosto del 2023.-El cantante mexicano Emmanuel, a punto de iniciar una nueva gira por Estados Unidos y con un disco sinfónico en el horizonte, dice que desde “chavo” se propuso no ser un “reventado” por la farra y el alcohol, sino un artista que llegara a la madurez con ilusión y energía.
El tramo estadounidense de la gira “Toda la vida”, que se desarrolla ya por México y otros países de Latinoamérica, arrancará el 25 de agosto en Orlando y, tras pasar por Miami (26 de agosto), Las Vegas (15 y 16 de septiembre), Chicago (sin fecha todavía), Los Ángeles (2 y 3 de diciembre), cerrará en Puerto Rico (sin fecha) a fines de año.
No pasará mucho tiempo hasta que Emmanuel regrese de nuevo a tierras estadounidenses, pues ya se anuncian para 2024 conciertos en Estados Unidos de la gira “Two’r Amigos”, que Emmanuel y otro artista mexicano, Mijares, realizan desde hace diez años.
En una entrevista telefónica, Emmanuel, quien cumplió 68 años el 16 de abril pasado, dice que a los conciertos de la gira “Toda la vida”, el mismo nombre de una de sus canciones más conocidas, va a traer sus grandes éxitos, que es lo que su público quiere “escuchar y cantar”, pero también algunas canciones nuevas.
Con más de 40 años de trayectoria, al llamado “rey del pop latino” le gusta el “riesgo” y también enredar a los músicos, que nunca saben qué es lo que va a ofrecer en cada concierto. Lo decide en función de muchas cosas, entre ellas el “tono” de la audiencia.
Aunque cantaba en uno de sus temas más conocidos que quería “dormir cansado“, Emmanuel no parece conocer el cansancio.
Se retirará cuando vea que ya no tiene la capacidad psíquica, la energía y la voz para darlo todo en el escenario, asegura.
Cuando se le pregunta de dónde saca sus energías responde que desde que supo que iba a ser artista siempre tuvo claro que debía “cuidarse“, mantener el cuerpo, que es “el regalo más importante que recibimos”.
Reconoce que en su vida tuvo buenos ejemplos, como el de su padre, Raúl Acha, de origen vasco pero nacido en Argentina, que había sido torero con el nombre de “Rovira” antes de ser su representante (Emmanuel también probó suerte en el ruedo, pero una cornada lo llevó a la música).