Promueve su agrupación política en un hotel de Mérida.
Mérida, Yucatán, 23 de mayo de 2019.- El expresidente Felipe Calderón Hinojosa dijo ayer en esta ciudad que le preocupa mucho las situaciones en el país, porque el panorama económico no es bueno.
El nuevo gobierno, señaló, está dando muchas señales que asustan a los inversionistas, que prefieren guardar su dinero y eso afecta los niveles de inversión, de ventas y de generación de empleos.
Calderón Hinojosa, quien impartió la conferencia “Los retos que enfrentamos”, en un hotel local ante más de 250 personas, dijo que también le preocupa es la concentración de poder que promueve el nuevo gobierno.
Éste se empeña en construir un poder hegemónico, mientras se colapsan los partidos tradicionales, afirmó.
La hegemonía de ese partido se observa también en las Cámaras y en 19 Congresos estatales, donde Morena es mayoría, lo que según el exmandatario, pone en riesgo la democracia.
Añadió que para enfrentar esta situaciones, los ciudadanos no deben agacharse, sino crear una organización que represente un contrapeso del poder y en ese sentido invitó a los asistentes a apoyar la agrupación México Libre, que impulsan él y su esposa Margarita Zavala.
Al inicio de su conferencia, Calderón Hinojosa se refirió a los momentos más difíciles de su sexenio.
Recordó que uno de ellos fue el accidente de aviación en el que perdió la vida su secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño. Otros fueron los acontecimientos registrados en el primer trimestre de 2009, cuando se acumularon sucesos propios de una “tormenta perfecta”, dijo.
Algunos de ellos fueron la crisis económica de Estados Unidos, la ocurrencia de varios ciclones fuertes, producto del cambio climático, y la epidemia de influenza AH1N1, un virus mortal del cual no se conocía vacuna, ni se sabía su grado de letalidad, afirmó.
También dijo que otro momento difícil fue el estallido de la violencia criminal, cuya principal característica fue la captura del estado y de sus instituciones por el crimen organizado, que se adueñó de ciudades y estados completos, ante la incapacidad del gobierno de responder, por la corrupción y la ineficacia de sus policías.
Calderón Hinojosa explicó que en su sexenio se dio un cambio en el modelo de negocio de los traficantes de drogas, que se convirtieron de transportistas de enervantes a Estados Unidos, a vendedores de drogas al menudeo.
Esto ocasionó, indicó, una lucha por el control de territorios entre distintas bandas de delincuentes, que se tradujo a su vez en un cruel espiral de violencia.
La captura de muchos espacios del gobierno hizo que los criminales descubrieran otras posibilidades de negocio, como el secuestro, la extorsión y el cobro de piso, añadió.
El exmandatario recordó que en su gobierno se dedicó a combatir al crimen organizado, aunque sus críticos vendieron la idea de que eso había sido un error, porque supuestamente disparó aún más la violencia.
“El error fue no haberla combatido antes”, dijo Calderón Hinojosa, quien reconoció que, en ese tema, su gobierno perdió la batalla de la comunicación, no obstante que la delincuencia bajó en su sexenio.
Desde el balcón.