De abril a la fecha se tienen contabilizados 299 nidos y 545 crías de la especie Caretta-caretta o caguama en Quintana Roo.
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de julio de 2014.- El gobierno del estado, por conducto de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), realiza acciones para conservar y proteger las tortugas marinas que llegan a desovar a las costas quintanarroenses.
El titular de la SEMA, Rafael Muñoz Berzunza, precisó que de abril a la fecha se tienen contabilizados 299 nidos y 545 crías de la especie Caretta-caretta o caguama.
Así como 89 nidos de la especie Chelonia mydas conocida comúnmente como blanca, en las costas de Xcacel-Xcacelito, santuario natural para la reproducción de las especies, agregó en un comunicado.
Las crías nacen en el corral de reubicación de los huevos y no representan el dato total de tortugas recién nacidas, porque en los nidos in situ o naturales, las crías eclosionan y por instinto inician su recorrido hacia aguas del mar”, explicó.
Destacó que el gobierno del estado, por conducto de la SEMA, en coordinación con asociaciones civiles, la Universidad de Quintana Roo, la Asociación Flora, Fauna y Cultura de México y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, trabaja en el ámbito de sus atribuciones.
Dando, agregó el funcionario estatal, puntual cumplimiento al eje Verde del Plan Quintana Roo 2011-2016, en su rubro de Biodiversidad, que establece la protección y conservación de especies, tanto de flora como fauna.
Anualmente llegan las especies blanca (Chelonia mydas), caguama (Caretta caretta), laúd (Demochelys coriecea) y carey (eretmocheiys imbricata).
De las cuales, las dos primeras tienen su principal punto de anidación en la zona protegida de Xcacel-Xcacelito, en la que durante 2013 se contabilizaron cuatro mil nidos de tortuga blanca y 500 de caguama.
Muñoz Berzunza dijo que las tortugas bebés serán liberadas la última semana de agosto y principios de septiembre, haciendo participes a los quintanarroenses, en especial a los niños, para inculcar la cultura de protección y conservación de la especie que está en peligro de extinción. (Excélsior)